Miercoles, 5 de octubre 2011


Como os decía el otro día, os voy a enseñar dos cuadritos que le he hecho para el cuarto de los peques.

Cuando me quedé embarazada de Pepe, me vi haciendo una auténtica obra de ingeniería para que en el cuarto de Nacho, segunda y diminuta habitación de la casa, me quedase espacio para el hermanito y aunque me costó lo suyo, creo que al final lo he conseguido.

He tenido que cambiar la habitación enterita y aproveché para cambiar el papel pintado y el color de la pared, que siempre he creído que las hormonas habían sido malas consejeras durante el embarazo de Nacho porque creo que en situación normal NUNCA y digo NUNCA ´habría comprado ese papel pintado: Así que aproveché y puse al papi brocha en mano y toda la habitación en un camel muy clarito y en el fondo para que visualmente me lo alejara un poquillo una raya camel y blanca, sencilla pero dadas las medidas de la habitación no se presta a mucho más.

Pues una vez terminada la redecoración sólo había que dejar claro que el cuarto era de los dos y empecé hace mucho tiempo unos cuadrillos que fui dejando y fui dejando y hasta la semana pasada no los terminé, la obra del Escorial, sí, pero contenta con el resultado, me parece que le han dado un toque muy personal y dulce y hoy, ya por fin, los reyes de mi casa adornan sus paredes.


2 comentarios:

Que guapetones!!Están para comerselos.
Lucia,la chica de Eiris está saliendo del horno,con otra cosilla más que la acompaña.Besos.

 

Te quedaron monismos!!!!!

 

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